Un farolito de ilusión para el corazón.

Hay momenos en los que uno se siente muy muy lejos de su casa, lejos de sus amigos, lejos de su familia... lejos de la vida de siempre. Pero hay momentos en los que se ve todo taaan cerca. Ayer fue uno de esos días.
Secundado por el indú, actualmente devenido en cocinero de estirpe (hace tiempo que no comía tan bien) y la pequeña Cecila asistimos al recital que ofrecieron Los Piojos en Madrid. Bastante interesante ver a una banda que, acostumbrada a tocar para mas de 5000 personas, ofrece un show para 300. Es como poner a Ronaldinho en una cancha de fútbol sala...sin dudas el hombre hace magia...como estos piojosos en un escenario de barrio. Nuevamente impecable!!
... y por otro lado esa sensación de que cuando uno salga del lugar, plagado de sudacas, iba a aparecer en Buenos Aires...porque se respiraba Argentina por todos lados. Eso si, llegaba a pasar inmigración y no quedaba nadie!!!
La Vela Puerca, después Leon y algunos mas que me perdí (por ejemplo ese ráudo e infructuoso derrotero venerdino hasta Asturias para ver a Kevin y su impecable ballet) esto de estar viendo bandas de lujo en "familia" es un lujo.
Desde lejos SI se ve!!!!

Le debo a mi público!!!

El tema es que tengo la casa llena de visitas, y eso hace que mi rutina cotidiana se haya modificado un poco. Primero el checho, terrible personaje exiliado en Marbella (como se esperaba de un galán de semejante envergadura). Después llegó Fola, prodigio violonísta especializado en música india (india...de la India, no? está claro!) Para completar el último espacio disponible para dormir en esta humilde morada, llega mi pequeña hermana directo de Buenos Aires, sin escalas a la mansión del General. Así que con todo eso, mas la posterior visita de Fran y Lu (la dupla carola 2005) la cosa se pone peliaguda!!!
No solo no actualizo el blog, sino que tampoco visito otros blogs...toda mi vida alterada por la visita de ilustres huéspedes.
Sepan disculpar las molestias ocasionadas, no estamos trabajando para que usted nos elija!!
I'll be back!!!!

Un aniversario elocuente

Pasaron ya tres años del atentado del 11 de septiembre a las Twin Towres de New York. En el mismo día se cumplieron seis meses del atentado en la estación de atocha en Madrid.
Todo este tiempo debería haber sido suficiente como para que algo hubiera cambiado, no? Parece que no del todo: Cientos de muertos en Rusia y una embajada voló en Jakarta. Un aniversario con actos a imagen y semejanza.
Mientras tanto el imperio de turno sigue matando moscas a cañonazos en Irak... y no matan precisamente moscas.
Asco y mucha tristeza es lo único que queda de todo esto. Ah! claro, y muchos muertos que poco tienen que ver con Alá, el petróleo, Bin Laden o el motivo que sea.

Lo logré!!

Si, fue muy duro. Pero todo esfuerzo tiene su recompensa.
Primero el precio, pero el dinero no puede hacer la felicidad, asi que mejor desprenderse del mismo. Después vino el propio acto de la compra, agotado en todos lados. Acá y allá. Finalmente la red de redes me permitió adquirirlo.
Pero claro, si bien la banda ancha tiene cada vez mas capacidad, todavía no se pueden bajar bienes físicos.
Así que ahí empezamos con el karma de la entrega en persona...que la dirección estaba mal puesta, que la gente de recepción todavía no me conocía. En fin, finalmente esta tarde me hice con el chiche después de casi un mes de paciencia.
Creo que todo tipo de comentario sobre las prestaciones se quedan cortas, aunque leí por ahí una frase que habla por sí misma: "Si el ipod tuviera un agujero, me lo follaría"

Blog antitaurino

Dijo una vez el escritor Joseph Pla al humorista Julio Camba:

“Yo no voy a las corridas porque he comprobado que la primera vez aparté lo ojos con asco cuando el picador le metió los hierros al toro. Después volví la cara cuando la sangre comenzó a correr en la suerte de las banderillas, pero tímidamente me atreví a mirar de soslayo. Luego mi estomago no resistió las diez estocadas que tuvo que dar un matador miserable para tumbar al morlaco aunque tampoco estaba dispuesto a perderme aquello, puesto que había pagado la entrada. Y tuve el valor para resistir incluso tres descabellos. Aplaudí al toro en el arrastre.
Poco a poco fui mirando de frente esa carnicería. En la cuarta corrida ya todo me parecía natural. Y en la quinta ya no me hubiera importado nada si en vez de un toro hubieran matado a mi primo”

El blog de Nanu, sitio antitaurino.